Arabia Saudita: deporte y turismo sostenible para convertirse en atractivo turístico mundial

Por Pablo Tortosa Rivas

Arabia Saudita ha emergido gradualmente como un protagonista destacado en la industria de los viajes y el turismo, consolidando su papel fundamental en el ámbito económico internacional. Este compromiso ha quedado patente en eventos recientes, como la Cumbre Global del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) y el Día Mundial del Turismo 2023, ambos celebrados en territorio saudí.

Según informes, Arabia Saudita ha experimentado un impresionante aumento del 378% en la llegada de visitantes, una estadística compartida por Gloria Guevara Manzo, asesora principal del Ministerio de Turismo de Arabia Saudita.

Por su parte, el ministro de Turismo, Ahmed Al-Khataheeb, ha demostrado un interés particular en el mercado latinoamericano, lo que se ha traducido en numerosas visitas a diversos países, con el objetivo de posicionar a Arabia Saudita como un destino turístico y de inversión de primer orden a nivel global.

El Reino Saudita ha embarcado en una serie de proyectos a gran escala, que incluyen la construcción de ciudades, aeropuertos y la creación de 600,000 nuevas habitaciones de hotel, todo ello con la ambición de atraer a 120 millones de viajeros para el año 2030, con una inversión estimada en 1 billón de dólares.

Además, Arabia Saudita está mostrando un enfoque renovado hacia el turismo sostenible, particularmente en relación con el Mar Rojo, que alberga el cuarto arrecife de coral más grande del mundo.

Arabia Saudita: inversiones para potenciar el turismo

Uno de los proyectos emblemáticos del Plan Visión 2030 del país es Neom, una megaciudad con un valor de 500 mil millones de dólares, 33 veces más grande que Nueva York. La primera fase de Neom se espera que abra en 2024 con Sindalah, junto con otros proyectos como The Line, Trojena y Oxagon, todos diseñados para posicionar a la región como uno de los lugares más futuristas del mundo, lleno de ciudades altamente conectadas, puertos, zonas comerciales, centros de investigación, instalaciones deportivas y destinos turísticos de primer nivel.

Además, en un esfuerzo por impulsar la contribución del turismo al Producto Interno Bruto (PIB), Arabia Saudita está apostando por el deporte, con un objetivo de contribuir con el 10% del PIB directamente a través de iniciativas deportivas.

Clubes de la Saudi Pro League han realizado inversiones sustanciales para atraer a destacados futbolistas, como Cristiano Ronaldo, Neymar, Karim Benzema y Roberto Firmino. Esta inversión no solo fomenta el deporte en el país, sino también atrae a un mayor número de turistas que desean presenciar los partidos.

También el país está implementando un ambicioso plan de expansión de la conectividad aérea, con el objetivo de aumentar el número de destinos de 99 a más de 250 para el año 2030.

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Arabia Saudita, con sus 2 millones de kilómetros cuadrados y una población mayoritariamente joven, está tomando medidas decisivas para potenciar su sector turístico.

Visit Saudí

Turismo sostenible y deporte, los ejes del crecimiento

Reconociendo su histórica dependencia del petróleo, Arabia Saudita está dando un giro hacia la inversión sostenible, en línea con la importancia de la agenda medioambiental y la preservación del planeta.

La nación está comprometida en convertir el turismo en el nuevo motor de crecimiento y desarrollo económico, con un fuerte enfoque en el turismo sostenible. Esto implica una colaboración estrecha entre empresarios, viajeros, gobiernos, destinos y organizaciones internacionales para acelerar acciones en pro de la sostenibilidad.

El ministro de Turismo subraya que el cambio climático es una responsabilidad compartida que requiere un compromiso significativo por parte de la industria para cuidar y conservar el planeta. En la actualidad, los viajeros prefieren destinos responsables con el medio ambiente y comprometidos con la protección de las comunidades y los diversos ecosistemas, así como aquellos que optan por fuentes de energía limpias y renovables.

Arabia Saudita, con sus 2 millones de kilómetros cuadrados y una población mayoritariamente joven, está tomando medidas decisivas para proteger su sector turístico, que es vital para su economía y emplea a millones de personas.

La nación se esfuerza por garantizar que el turismo continúe siendo un motor de crecimiento y cumpla con los objetivos climáticos establecidos en los Acuerdos de París.